El retrato fotográfico de niños muertos es un tema que hace vibras las fibras más
sensibles de cualquier publico.
La fotografía de los "Angelitos" tenía los mismos elementos que se utilizaba en la pintura
el pequeño era coronado con flores, con una palma o flor en la mano, el pequeño no se
econtraba solo al momento de ser fotografiado, lo acompañaba su familia y sus padrinos
de bautismo.
El fotografo de este momento íntimo y agridulce tenía la tarea de capturar la imagen del
pequeño, imagen que los padres atesorarían como ultimo recuerdo.
Sus imágenes son duras, cargadas de tristeza, donde el dolor vivo contrasta con el
infante. En estas imágenes no hay mas espacio que para la despedida temporal y la promesa
del encuentro eterno.